Urbanismo y Transdisciplinariedad
Intersecciones (Puntuaciones en relación con el abordaje de la articulación de lo formal y lo informal en América Latina)

 

" nada es tan complejo que no pueda ser organizado"  
Ilya Prigogine
 


Diagrama de interdisciplinariedades

El abordaje de la cuestión urbana contemporánea en Latinoamérica exige colocar en el centro de las atenciones las relaciones entre los sectores formales e informales, abordando de manera interrelacionada los aspectos físicos, sociales y ecológicos, lo que demanda una forma de trabajo donde se interceptan varias disciplinas.

Para poder pensar articulaciones entre la ciudad formal (la que obedece a formas de desarrollo que ocurren dentro de los canales legales, planificados y regulados del urbanismo) y la ciudad informal ( la que se caracteriza por una ocupación indiscriminada del suelo, falta de títulos de propiedad y de lineamientos oficiales, ausencia de equipamientos y servicios públicos, y por viviendas deficientes) es necesario considerar la dinámica específica de la megalópolis latinoamericana contemporánea, que excede las herramientas conceptuales y los instrumentos prácticos disponibles en el campo disciplinario del urbanismo.

De varias maneras se experimenta hoy una reposición política de lo ciudadano, en el sentido de expresar demandas de "urbanidad" emergentes desde diversos sectores sociales, lo que recoloca el tema de lo "marginal", manifestado a través de la necesidad de una recomposición de las centralidades. Nuevas fuerzas emergen (la presión de los favelados en Rio de Janeiro, los descontentos de todo tipo que marchan cada semana en Buenos Aires, etc.) reconfigurando nuestros paisajes urbanos. Proceso tanto de confluencia cuanto de choque como horizonte socio-cultural y político del urbanismo contemporáneo, que torna necesario distinguir entre "estratégias" mas amplias disponibles a las clases gobernantes y "tácticas" mas limitadas a que se confinan los ciudadanos tratando de enfrentar situaciones concretas.

La brecha que existe entre las practicas espaciales y los espacios representativos obliga a pensar nuevos modelos de interpretación y organización capaces de generar sentido. Los cambios en los modos de producción han provocado en las ultimas décadas, al nivel macro, nuevas formas de urbanidad y organización material relacionadas con el pasaje de la economía de escala a la economía de alcance. Al nivel local, nuevas formas de segregación socio-espacial han hecho su aparición fragmentando aún mas las grandes metrópolis. La inserción de las ciudades en la economia mundial presenta, en lo que se refiere al desarrollo local, una clara evidencia de la necesidad de búsqueda de articulación de las relaciones económicas y sociales entre ciudades y entre diferentes áreas de la misma ciudad, incorporando las comunidades a los procesos de transformación. Para obtener resultados verificables es necesario adecuar tanto el marco teórico cuanto los métodos, a las presiones ejercidas sobre el ámbito local en el sentido de reforzar su propria lógica histórica, interpretando el dinamismo de los actores sociales, políticos y económicos.

Hoy es evidente la necesidad de buscar articulaciones tanto entre los espacios de flujos y la formación de centralidades, cuanto entre los sectores formales e informales de la sociedad como formas de estructurar las nuevas topografías urbanas emergentes. Lo que viene a colocar contundentemente el problema de la búsqueda de la conectividad de la estructura urbana, del "milieu" conductor urbano, como cuestión central. Redireccionar el funcionamiento de la estructura sin perder masa critica y potencializarla como una base para la evolución, reconociendo su esencia discontinua pero conectiva a través de intervenciones en lo existente cuidadosamente seleccionadas, es el desafío actual. Esta problemática exige la búsqueda de nuevos paradigmas.

Pero hoy verificamos tanto una crisis de paradigmas cuanto al mismo tiempo una búsqueda de nuevos paradigmas, relacionados con complejidad, pluralidad, praxis y transdisciplinariedad, este último un concepto en busca de sistematización.

Asistimos a un desdibujamiento de fronteras, lo que provoca por un lado caos, incoherencia, fusión e hibridación entre métodos y teorías, y por otro lado, una abertura de fronteras y la necesidad de la consideración de contextos en constante mutación. Este proceso produce una valorización de la descentralización y de la relatividad, en relación con el abordaje de objetos complejos.

La complejidad tiene distintas manifestaciones; como mínimo, un objeto que hace parte de un sistema de totalidades parciales y que está sometido a determinaciones no lineales y a evaluaciones sucesivas de hipótesis provisorias. El objeto complejo es multifacetado y campo de interés de múltiples discursos y de diferentes miradas. Su abordaje abarca la intervención de múltiples discursos disciplinarios; implica un entrecruzamiento de discursos.

Resumidamente, el objeto complejo es múltiple, no lineal y plural, lo que exige la construcción de formas alternativas a la disciplinariedad, la observación de la propia práctica de discursos y lo por ella alimentado.

La Multidisciplinariedad es lo que se refiere a un conjunto de disciplinas sin que los profesionales implicados mantengan entre si relaciones de colaboración con objetivos comunes.

La Pluridisciplinariedad implica la manutención de relaciones entre si y los objetivos son comunes; presupone una perspectiva de complementariedad sin por eso haber sistematización; cada investigador busca hacerse comprender por los otros.

La Interdisciplinaridad engloba campos de poder muy desiguales en contacto; es el caso de la mayoría de las investigaciones realizadas en el campo de lo urbano.

Podemos identificar tres acepciones diferentes del concepto de Interdisciplinariedad, de acuerdo con el resultado del informe producido como consecuencia del encuentro convocado por la Universidad de Stanford, en agosto de 2002, para tratar de crear un nuevo formato de trabajo.

a) La versión banal, producto de una "complementariedad" entre diferentes disciplinas, normalmente consecuencia de la necesidad de trabajar juntos abordando diferentes aspectos de una misma problemática. Por ejemplo, la relacionada con la cuestión urbanístico-social en las grandes metrópolis Latioamericanas, en la cual intervienen y se interceptan urbanismo, arquitectura, geografía urbana, sociología, economía, ingeniería, derecho, etc. Esta interdisciplinariedad "de fin de semana", es portadora de la convicción de que lo que las otras disciplinas puedan decir, en nada cambiará el trabajo que cada participante realiza. El resultado final es un "informe-sumatória" donde los criterios de coherencia entre los diferentes "productos" de cada disciplina son poco consistentes.

b) La versión académica, producto del tiempo que algunos investigadores pasan juntos como consecuencia de la obligación establecida por algún financiamiento concedido por instituciones de enseñanza o que se dedican oficialmente a investigaciones "interdisciplinarias". El resultado final es una conversación intelectualizada en la cual cada uno de los interlocutores trata de exhibir su trabajo individual, sus hipótesis "innovadoras", su "originalidad".

c) La posibilidad de una verdadera co-elaboración intelectual relacionada con la puesta en interacción de las diversas disciplinas involucradas, cuyos resultados potenciales no podrían haber sido producidos aisladamente. Para que esto pueda producirse es necesario que previamente haya sido establecido un terreno común, por medio de conceptos fundamentales compartidos.

La Transdisciplinariedad implicaria la intersección de diferentes disciplinas, provocando atravesamientos entre campos capaces de posibilitar múltiples visiones simultaneas del objeto en estudio.

Campos disciplinarios constituyen estructuras; interaccionando entre si producen relaciones. Hay relaciones de poder técnico pero existem también posibilidades de intesección entre las disciplinas.

Para alcanzar a focalizar la complejidad, superando la fragmentación disciplinaria, hay que avanzar mas allá de la sumatoria de campos, proponiendo modalidades de acción conjunta que expongan las cuestiones.

Los campos disciplinarios precisan incorporar la crítica lógica al mismo tiempo que la perspectiva pragmática. Cada disciplina tiene acceso a una faceta del objeto de estudio y por eso es necesario producir agentes capaces de circular entre dos o más campos disciplinarios simultáneamente.

De esta forma, para poder superar el paradigma de la multidisciplinariedad ( la cuestión de los límites de las disciplinas) es necesario producir la circulación de sujetos por diferentes discursos.

Hay varias formas de encaminarse para esta producción:

a) los sujetos se encaminan por varios campos al mismo tiempo, independientemente de las academias,

b) realizando aplicaciones de campo, interceptando dos o mas disciplinas (urbanismo y psicoanálisis; filosofia, arquitectura y economia urbana, etc).

c) identificando problemáticas que no se restringen a un objeto.

Hoy verificamos una fuerte demanda en el sentido de compartir formas de aproximación a problemáticas comunes: las relaciones micro-macro, general-local, individual-coletivo, etc. El problema es como dar cuenta de procesos que suceden tanto en el nivel macro como en los niveles micro; como conectar lo individual con el interés colectivo.

Para trazar el cuadro de una problemática se torna necesario reunir conjuntos de informaciones operando mediante la organización por problemas, la organización por enfoques y la organización a través de estructuras donde todos los niveles se conectan a un sistema mayor.

Es necesario poner en práctica :

a) abertura para la red, compartiendo experiencias;

b) una ética transparente, revelando como se realiza;

c) la construcción de lazos con la sociedad en su conjunto y en torno de cuestiones específicas.

Jorge Mario Jáuregui